«Una especie de plástico natural»

Federica Bertocchini es una apicultora aficionada y miembro del Consejo Nacional de investigaciones científicas (CSIC). Uno de los enemigos del apicultor es la oruga gusano de cera, que es la larva de la polilla de la cera mayor. Estos insectos residen dentro de colmenas y viven en la cera de abejas (también hacen para el cebo de pesca grande). Los apicultores necesitan entrar y sacarlos de sus colmenas todo el tiempo.

Bertocchini decidió almacenar temporalmente los gusanos de cera que estaba quitando de una colmena en una bolsa de plástico. Pero la bolsa no permaneció segura durante mucho tiempo, agujeros empezaron a aparecer en ella. Bertocchini reportó su hallazgo y comenzó a trabajar con el Departamento de bioquímica de la Universidad de Cambridge para experimentar a las “orugas come plástico.”

Lo que descubrieron es que los gusanos de cera son excelentes en la ruptura de plástico. Donde las bacterias pueden biodegradar el plástico a una tasa de alrededor de 0.13 mg por día, 100 gusanos de cera mastican tanto como 184mg por día. En cuanto a por qué pueden hacer esto, se cree que está relacionado con su dieta de cera de abejas.

La cera es, según Bertocchini, «una especie de plástico natural», por lo que las orugas ya se han configurado para descomponer estructuras similares a nuestros plásticos fabricados por el hombre. Y no sólo se lo comen, rompen las cadenas de polímeros en el plástico, permitiendo la verdadera biodegradación.

Via: Entrepreneur.com